Ocurre a veces, que los niños no se relacionan adecuadamente, lo podemos observar cuando:
- Es excesivamente tímido
- No habla de sus amigos
- Tiene autoestima baja
- Expresa sus frustraciones con agresividad
- No expresa sus deseos o gustos de forma clara
- Prefiere estar en casa haciendo cualquier cosa que salir a jugar
- No suele participar en juegos con otros niños
- No sabe perder
- No sabe decir no
Los seres humanos somos seres sociales que vivimos en continua interacción unos con los otros. Las habilidades sociales son un conjunto de conductas necesarias que nos permiten interactuar y relacionarnos con los demás de manera efectiva y satisfactoria. Para evaluar y entrenar las habilidades sociales es importante tener en cuenta aspectos como la cultura o las variables sociodemográficas.
Además, resultan ser conductas aprendidas, esto quiere decir, que no nacemos con un repertorio de habilidades sociales, sino que las vamos desarrollando a lo largo de nuestro ciclo vital. Se aprende de lo que se observa, de lo que se experimenta y de lo que se recibe en las interacciones interpersonales.
Aquí os dejamos unos «tips» para que podáis trabajarlo juntos en casa:
- Refuerzo positivo. Refuerza sus conductas sociales positivas (ej. el que haya bajado a jugar al patio, el que llame a un amigo por iniciativa propia, una comunicación asertiva, etc.).
- No utilices el castigo de forma sistemática. Muchas veces los niños entran en una situación de indefensión aprendida, es decir, llegan a pensar «da igual lo que haga ya, porque me van a castigar», por lo que el castigo deja de ser útil.
- Imitación. Consiste en que demostréis al niño, con vuestras propias actitudes, como ponéis en práctica diferentes habilidades en la vida cotidiana. Por ejemplo, si queréis que vuestros hijos miren a los ojos al hablar, no podéis vosotros no hacerlo cuando habéis con ellos u otras personas, o si queréis que vuestros hijos pidan las cosas «por favor y gracias» os tienen que observar haciéndolo a vosotros. Vosotros sois los modelos más importantes para vuestros hijos.
- Evita resolver problemas de forma agresiva.
- Fomenta la autonomía e independencia, evita la sobreprotección.
- Propiciar la interacción social. Llévale al parque, invitar niños a casa, extraescolares que le gusten, etc.
- Información sobre cómo ha actuado. Cuando el niño está realizando una conducta, se le informa de lo que ha hecho bien y de lo que le falta por mejorar o aprender
- Ten en cuenta sus sentimientos, emociones y necesidades. Comunícate con el niño y ponerle nombre a lo que siente.
- Establecer normas y límites firmes.
- Acuerdo entre la pareja a la hora de establecer refuerzos y límites.
Si queréis seguir aprendiendo sobre esto, asiste a nuestra escuela de padres o inscribe a tu hijo/a en alguno de nuestros talleres relacionados con el trabajo de estas habilidades.
Sara Martínez. Directora de Dando Pasitos
