Psicología Perinatal

¡Qué de emociones sienten las mujeres en su etapa perinatal! ¿Pero es que acaso las madres sienten algo diferente a las personas que no lo son? ¿Existen emociones exclusivamente de madres?

Podemos entender como “emociones de madres”, aquellas emociones y sentimientos que atraviesan las mujeres en su etapa perinatal, es decir, desde la concepción al embarazo, el parto, el postparto y el puerperio.

La psicología perinatal es la rama de la psicología que se encarga de la prevención, cuidado, apoyo, diagnóstico e intervención en la salud mental de la mujer en esta etapa.

Os dejamos algunos de los aspectos en los que trabajamos desde Dando Pasitos:

• Preconcepción y concepción: dificultades para conseguir un embarazo, problemas de fertilidad.
• Embarazo: miedo, culpa (¿estoy haciendo bien? ¿le voy a transmitir mis emociones al bebé? ¿debería…?), vínculo con el bebé, relaciones familiares, identidad como madre, lucha entre cuidarme, cuidar y producir, recta final del embarazo.
• Parto: miedo al parto, seguridad y calma durante el parto, violencia obstétrica, parto traumático.
• Postparto: lactancia sí o no, miedo, culpa, depresión postparto, ansiedad postparto, vínculo con mi bebé, conexión con nuestras heridas, conexión con nuestra niña interior, no quiero pasarle “mis basuras” a mi bebé, no sé si voy a ser capaz de ser una buena madre, cambio de identidad, cambio de roles, pareja en el postparto, sexualidad en el postparto, familia en el postparto, cambio de identidad, vuelta al trabajo, postparto cuando tienes otros hijos…
• Duelos: pérdidas gestacionales u otras pérdidas.

Con una psicóloga perinatal, la mujer puede tener la experiencia de conocerse un poco más, de confiar en sí misma como madre, dejando aflorar sus instintos más mamíferos, de cuidarse, de cuidar y sentir calma en el vínculo con su bebé para disfrutar de esta nueva etapa.

A continuación, os dejamos un testimonio de una de las psicólogas perinatales del centro:

“Para mí, ser madre es algo que te mueve, te monta y te desmonta. Es como si te metieran en una batidora y removiesen a 100 revoluciones. Ser madre es amor infinito, es miedo, es fuerza, es culpa, es cambio, es reencontrarte contigo misma, desconectar de ti, de tu «yo», de tu esencia, reconectar y encontrarte con otra identidad, con otro cuerpo, con otro rol, con otras necesidades. Y eso en muchos casos es duro, es complejo y difícil de encajar. Ser madre son renuncias, es agitación y calma. Es quedar en otro plano y priorizar a otro por delante de ti» (leer testimonio completo) Sara Martínez. Psicóloga.

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